No, este tampoco será un post de política, aunque muchos de nuestros dirigentes deberían estar repartidos entre zoológicos, circos y laboratorios donde estudiar su comportamiento, hoy me propongo disertar sobre los zoos convencionales.
Hace unos días estuve con la familia en un zoo y siempre que visito un lugar de estas características me persigue el mismo pensamiento ¿qué derecho tiene el ser humano a mantener encerrados de forma artificial y fuera de su hábitat natural a tantos animales?
Naturalmente quedan excluidos de tal consideración animales domésticos o de granja puesto que, en su mayoría, son especies que nunca han estado en libertad por lo que sus capacidades de supervivencia estarían bastante mermadas en un ambiente no humano. Aún así no es un tema carente de controversia si no veamos a los veganos y sus tesis sobre el especismo.
En concreto la desazón por el estado de reclusión animal viene dado sobre todo por aquellos animales que son capaces de percibir las características de su entorno y responder a sus estímulos y limitaciones. Empezaría por aquellos grandes felinos nacidos para desenvolverse en enormes territorios, osos, camellos y demás y terminaría, como no, delante de la jaula de los grandes simios pasando por delfines y focas y obviando a reptiles cuya, aparente interacción ambiental es bastante escasa, así como sus necesidades intelectuales.
Parece que eso tan esquivo como es la conciencia de uno mismo no es patrimonio sólo del mono desnudo, si no que sus más cercanos compañeros de evolución comparten dicha sensibilidad, al igual que los cetáceos que tan alegremente nos divierten con sus piruetas a cambio de unas sardinas de aspecto relativamente saludable. Basta con ponerse delante de un chimpancé o de la majestuosidad de un gorila para preguntarse qué, valga la redundancia, se estará preguntando en ése momento. ¿Al haber nacido en el zoo creerá natural que tantas caras, muchas de ellas de tres ojos lo observen? ¿Al haber vivido siempre en dicho entorno no será le resultará natural el confinamiento o pese a ello será consciente de su propio encarcelamiento?
Hoy en día sabemos que los chimpancés se dividen en grandes culturas no innatas, o sea aprendidas, sabemos que establecen complejas relaciones dentro de los grupos (vean a los bonobos por ejemplo) y son capaces de deprimirse, reconocerse, enojarse y alegrarse tal cual nosotros. También sabemos que los gorilas comprenden el paso del tiempo y mantienen una inteligencia similar a la de un niño pequeño pero con doscientos kilos de músculo justo debajo (apunte freak del día: algunas especies de loro desarrollan una inteligencia equivalente a la de un niño de tres años, aquí queda el dato). Por lo tanto es fácilmente comprensible para todos que son conscientes de donde están, al igual de que delfines y orangutanes. Lo que no está tan claro es si les importa o les afecta desde un punto de vista emocional. Aunque especies como el lince o el oso panda no se reproducen en cautividad por el alto nivel de estress que ello les provoca.
Ya hemos dicho anteriormente que la mayoría de animales que pueblan nuestros zoos (si no todos porque creo que la ley es bastante restrictiva en eso) han nacido en un zoológico y por tanto carecen de la experiencia de la vida salvaje y no se puede echar de menos lo que no se conoce pero seguimos sin resolver la duda inicial: ¿tenemos derecho a mantener a dichos animales bajo nuestra supervisión por el mero hecho y disfrute de nuestros momentos de asueto? Pues la respuesta se me sigue escapando.
Y se me escapa porque los zooloógicos actuales, al menos los respetables, realizan más tareas que la simple exposición de animales sin disecar en ambientes pseudorrealistas. Hoy en día nuestros zooloógicos realizan importantes investigaciones sobre el reino animal, tanto para su comprensión como para la divulgación científica, ¿si no de qué manera podríamos admirar la altura de una jirafa, la extraña belleza de un oso hormiguero o la inmensa panoplia de aves a cual más exótica e insólita, nuestros hijos no verían nunca a un león en su frenética actividad diaria (¡duermen veintidós horas al día!) o la graciosidad pingüina sobre cemento pintado de un azul gélido?. No son pocos los avances veterinarios conseguidos en zoológicos que permiten ampliar lo poco que sabemos del mundo en el que vivimos y sobre nosotros mismos como parte de él, pero tampoco lo son las especies al borde de la extinción que tienen una oportunidad de supervivencia con la cría controlada en centros de reproducción en cautividad dependientes de los mismos zoológicos. La conservación de especies es otro de los objetivos de las instituciones zoológicas actuales.
Los zoológicos parecen una herramienta de divulgación y conservación muy importantes, pero aún así, al observar la mirada profundamente lacónica de un chimpancé de avanzada edad me sigo preguntando si realmente podemos justificarnos en enarbolar la bandera de la ciencia y el conocimiento como justificación.
Mis ideas, mis pensamientos, mis reflexiones y todo aquello que quiera comentar.
domingo, 27 de julio de 2014
viernes, 11 de julio de 2014
Las cuentas que no salen o el negocio de la política
Hace escasos días el Tribunal de Cuentas, sí ese sitio donde uno trabaja como con la familia y donde los informáticos saben encender y apagar ordenadores, ha hecho público el informe sobre el estado contable en 2013 de los partidos políticos sometidos a su control. Pero esto no es noticia, esto debería ser normal y no tener mayor trascendencia que la que pudiera tener en su contenido, que tampoco debiera ser especialmente escandaloso. Pero lo es.
Y lo es por varios motivos, el primero por las grandes cantidades de dinero que se mueven. Los que tenemos alguna relación con el mundo de la política sabemos que todo cuesta dinero, absolutamente todo, pero los que pertenecemos a formaciones pequeñas también sabemos extraer rendimiento de las piedras y capitalizar como nadie la voluntariedad humana.
Y todo esto viene tras revisar someramente los datos contables de los partidos en cuestión. Vayan los datos por delante, primero las subvenciones recibidas y los ingresos por donación directa y cuotas:
Un motivo posible, nuestros políticos, mayoritariamente, creen que aparentar les reporta mayores beneficios electorales que tener una ideología clara con propuestas acordes y un buen sistema de comunicación. Y esto pensando bien y no creyendo que hay quien se lo lleva crudo o que se trata simplemente de sibaritismo muy mal entendido, eso sería algo muy feo que otro día trataremos.
Y lo es por varios motivos, el primero por las grandes cantidades de dinero que se mueven. Los que tenemos alguna relación con el mundo de la política sabemos que todo cuesta dinero, absolutamente todo, pero los que pertenecemos a formaciones pequeñas también sabemos extraer rendimiento de las piedras y capitalizar como nadie la voluntariedad humana.
Y todo esto viene tras revisar someramente los datos contables de los partidos en cuestión. Vayan los datos por delante, primero las subvenciones recibidas y los ingresos por donación directa y cuotas:
Las cifras cantan por sí mismas, pero vayamos por partes. Primero las donaciones particulares; sobre estas nada a decir, cada uno es libre de tirar donar su dinero a quien le parezca oportuno, no juzgaremos, de momento el motivo o el uso que se de a dicha donación. Lo que realmente llama la atención son las abultadas cifras de subvención que reciben los partidos. Resulta que no basta con los más de setenta millones de euros que reciben los partidos de donantes privados si no que donantes públicos, es decir todos nosotros, "donamos" más de doscientos millones de euros a las formaciones políticas para su funcionamiento más los que se reparten según votos obtenidos, unos sesenta y tres en este ejercicio. Aquí uno puede pensar ¿y para qué? ¿Por qué reciben los partidos políticos tanto dinero? En el ejercicio analizado las formaciones suman alrededor de 344 millones de euros (sin contar las subvenciones a fundaciones afines) y seguimos preguntando ¿para qué?
La respuesta estándar es para su correcto funcionamiento, claro. Pero no queda tan claro, primero no hace falta tanto dinero para mantener lo que se hace actualmente en política (y no nos referimos a lo que puedan hacer algunos políticos con escrúpulos limitados). Y sé que no hace falta porque si fuera así la asignación sería lineal, es decir, TODOS los partidos recibirían la misma asignación para poder concurrir a las elecciones en igualdad de condiciones, en cambio se subvenciona en consonancia a los resultados electorales obtenidos. La ventaja de este sistema está clara, así el dinero va a manos de los partidos que tienen el favor ciudadano y no se financia a grupúsculos de oscuros intereses ni se favorece que alguien con pocos escrúpulos monte un partido sólo para poder embolsillarse dichas subvenciones. Pero la flaqueza del sistema también es clara, de esta forma se dificulta la igualdad de condiciones en contiendas electorales incluso con el modelo agotado, como ahora, dificultando el acceso a la arena a nuevas formaciones y, en definitiva a carne fresca. Entonces, ¿deberíamos subvencionar a todos por igual? No, claro que no. Cada vez me seduce más la idea de que cada partido debería subsistir con lo que sus afiliados le aporten, sería un sistema algo más justo y, seguro, nos daría tardes épicas de populismo por parte de algunas formaciones y un mayor interés en desempeñar mejor que bien las responsabilidades de cada uno para con sus electores.
Los partidos políticos tienen como tarea proponer legislaciones y procurar que el gobierno de turno se contenga ante la generosidad amiguil, reducirla a cero es lo deseable, y para tal faena no se necesitan tantas alforjas. Por lo tanto... ¿para qué tanto dinero? y lo que es peor, ¿por qué la necesidad de endeudarse tanto con bancos hasta el extremo de tener más deudas que capital y bienes, esto es, en quiebra técnica?
La respuesta estándar es para su correcto funcionamiento, claro. Pero no queda tan claro, primero no hace falta tanto dinero para mantener lo que se hace actualmente en política (y no nos referimos a lo que puedan hacer algunos políticos con escrúpulos limitados). Y sé que no hace falta porque si fuera así la asignación sería lineal, es decir, TODOS los partidos recibirían la misma asignación para poder concurrir a las elecciones en igualdad de condiciones, en cambio se subvenciona en consonancia a los resultados electorales obtenidos. La ventaja de este sistema está clara, así el dinero va a manos de los partidos que tienen el favor ciudadano y no se financia a grupúsculos de oscuros intereses ni se favorece que alguien con pocos escrúpulos monte un partido sólo para poder embolsillarse dichas subvenciones. Pero la flaqueza del sistema también es clara, de esta forma se dificulta la igualdad de condiciones en contiendas electorales incluso con el modelo agotado, como ahora, dificultando el acceso a la arena a nuevas formaciones y, en definitiva a carne fresca. Entonces, ¿deberíamos subvencionar a todos por igual? No, claro que no. Cada vez me seduce más la idea de que cada partido debería subsistir con lo que sus afiliados le aporten, sería un sistema algo más justo y, seguro, nos daría tardes épicas de populismo por parte de algunas formaciones y un mayor interés en desempeñar mejor que bien las responsabilidades de cada uno para con sus electores.
Los partidos políticos tienen como tarea proponer legislaciones y procurar que el gobierno de turno se contenga ante la generosidad amiguil, reducirla a cero es lo deseable, y para tal faena no se necesitan tantas alforjas. Por lo tanto... ¿para qué tanto dinero? y lo que es peor, ¿por qué la necesidad de endeudarse tanto con bancos hasta el extremo de tener más deudas que capital y bienes, esto es, en quiebra técnica?
Un motivo posible, nuestros políticos, mayoritariamente, creen que aparentar les reporta mayores beneficios electorales que tener una ideología clara con propuestas acordes y un buen sistema de comunicación. Y esto pensando bien y no creyendo que hay quien se lo lleva crudo o que se trata simplemente de sibaritismo muy mal entendido, eso sería algo muy feo que otro día trataremos.
miércoles, 2 de julio de 2014
Juego de tronos
Como no sólo de política vive el hombre me permito un momento de asueto en la vorágine de noticias frescas que nos rodean y voy a elucubrar sobre el futuro del único trono que me interesa mínimamente: El trono de hierro.
No puedo negar que soy seguidor de la saga que ha hecho famoso a George R.R. Martin y la considero muy superior a eso llamado "El señor de los anillos" [modo flame activado] ;) Y eso incluye a la serie de la HBO que trae unos siete reinos con una cuidada presentación. Pero no quiero hablar de la serie si no de quien acabará ocupando el tan preciado trono.
El señor Martin ya ha adelantado que serán siete los libros que completarán la serie y que ya tiene muy claro quien será el poseedor de tan incómodo asiento pese a lo cual no suelta prenda dejando a los fans el trabajo de adivinar (y discutir) sobre las opciones favoritas de cada uno. Voy a proceder a enumerar las opciones que creo tienen más posibilidades sin olvidar las menos, porque si algo ha hecho bien Mr. Martin es acabar, literalmente, con los personajes favoritos en cada momento. Parto del final del quinto libro Danza de Dragones.
¡¡ATENCIÓN!!
¡¡Si no estás al día en las novelas leerás SPOILERS!!
En otro orden también albergan posibilidades aunque a mi entender menores:
Bien, tras el divertimento os dejo con la reflexión y os invito a comentar la entrada despotricando contra mis razones.
No puedo negar que soy seguidor de la saga que ha hecho famoso a George R.R. Martin y la considero muy superior a eso llamado "El señor de los anillos" [modo flame activado] ;) Y eso incluye a la serie de la HBO que trae unos siete reinos con una cuidada presentación. Pero no quiero hablar de la serie si no de quien acabará ocupando el tan preciado trono.
El señor Martin ya ha adelantado que serán siete los libros que completarán la serie y que ya tiene muy claro quien será el poseedor de tan incómodo asiento pese a lo cual no suelta prenda dejando a los fans el trabajo de adivinar (y discutir) sobre las opciones favoritas de cada uno. Voy a proceder a enumerar las opciones que creo tienen más posibilidades sin olvidar las menos, porque si algo ha hecho bien Mr. Martin es acabar, literalmente, con los personajes favoritos en cada momento. Parto del final del quinto libro Danza de Dragones.
¡¡ATENCIÓN!!
¡¡Si no estás al día en las novelas leerás SPOILERS!!
Daenerys Targaryen A nadie sorprendo si digo que es la favorita para terminar con las guerras en Poniente. A lo largo de sus desventuras en las ciudades libres, el mar Dothraki y la bahía de los esclavos se ha ganado nuestro favor reforzando la idea de que hay Targaryen y Targaryen, y ella estaría en la onda del maestro Amon o de su hermano Rhaegar. Conquistaría poniente gracias a sus dragones, sola o con aliados ya que ha demostrado una gran inteligencia táctica sin contar con la nostalgia que algunos integrantes de Poniente tienen de los grandes tiempos gloriosos de los Targaryen y sus dragones. |
|
Jon Nieve Los desgraciados siempre despiertan simpatías y Jon Nieve no puede ser una excepción, impulsivo pero ecuánime y justo, reúne las características que se le suponen a un líder. Probablemente veamos el fin del muro en uno de los próximos libros junto a la exterminación de los caminantes blancos. Un importante papel jugará su hermano Brandon Stark en alianza con los Niños de los Bosques aunque no descartaría sorpresas sobre la madre del mismo Nieve cuya identidad no está confirmada, aunque hay quien apunta a que es hijo de Rhaegar Targaryen y Lyanna. Si así fuera rizaríamos el rizo puesto que sería capaz no sólo de cabalgar dragones, si no de poseerlos como buen cambiapieles. Otro candidato a desposar a Daenerys aunque sólo tras coincidir en la batalla. Tiene junto a Daenerys la mayor parte de posibilidades, parece que todos los secundarios se están colocando para favorecerlo. |
|
Tyrion Lannister El gnomo es un superviviente, no lo puede negar nadie, y sobrevive gracias a su ingenio y los, cada vez menos, que lo minusvaloran. Tyrion es único negociando y encontrando soluciones, por lo que no sería extraño que tras una rocambolesca batalla feura el único heredero/pretendiente al Trono de Hierro. Una alternativa nada desdeñable sería que consiguiera, gracias a su labia, un ventajoso matrimonio con Daenerys, naturalmente después de disolver por no consumación su matrimonio con Sansa Stark. |
|
Sansa Stark No podemos despreciar la voluntad de sorpresa de George R.R. Martin que ha proporcionado una madurez inusitada a la frágil y núbil hija mayor de los Stark. Sansa ha realizado un intenso aprendizaje en su vida en Desembarco del Rey acelerada luego en el Valle y en el Nido de Águilas. Al final sacará un buen partido de su relación con meñique..., lo cual nos haría abandonar la idea de una Arya reina y pensar en su futuro lejos de Desembarco del Rey y con otras ambiciones, o no? |
|
Arya Stark Junto a Jon Nieve Arya ha sido uno de los personajes en evolucionar más. El hecho de estar sola desde muy al principio y gracias a su carácter fuerte e independiente Arya es capaz de adaptarse a todas las condiciones y sobrevivir tanto gracias a su inteligencia como al engaño o la violencia. Al haber cruzado el Mar Angosto y estar en Braavos se encuentra muy cerca de Daenerys. Un eventual encuentro y posterior pacto tampoco es impensable puesto que les une el odio a muchos, eso sí, pasando por encima del hecho de que Ned Stark fuera uno de los artífices de la derrota de la casa Targaryen. |
|
Stannis Baratheon Siendo como es el personaje con mayor legitimidad al puesto, me parece que se le ha reservado el papel de desgraciado eterno pretendiente. Stannis lo intentará hasta el final que será cuando R'hllor le retire el favor y se lo lleve o cuando algo lo convenza de que otro candidato es más adecuado (altamente improbable). Stannis no es tan inteligente como su hermano Robert, pero es más disciplinado. Ser Davos Seaworth es su mayor valedor y Melissandre, la sacerdotisa roja, la hábil manipuladora cuyas intenciones no conocemos, pero insiste mucho en hacer a Stannis rey y no deja de repetir que la sangre real es poderosa y su ansia de poder es bastante evidente... |
|
Jamie Lannister De lejos el matarreyes ha sido el personaje que más ha evolucionado en la saga. Ahora tenemos a alguien que ya no es manipulable por Cersei y que ha tomado consciencia de lo que significa la lealtad y la justicia. No creo que se gane muchos amigos fácilmente, pero estará al caer un sacrificio que lo redima. En cualquier caso actualmente goza de un caracter atormentado que no parece hacerle pretender el trono. No desposará a Brienne aunque es una bala en la recámara que el autor puede no guardarse. |
|
Cersei Baratheon Existe una remota posibilidad de que nuestro amigo George nos depare un final no lo todo feliz que esperamos y la (muy) odiada Cersei se haga con el trono tras acabar con todo oponente. A su favor, su red de espias, inteligencia para el mal y capacidad de urdir acuerdos antinaturales; si se deshace de Jamie y con Tyrion desterrado y, presuntamente, muerto es la heredera de Roca Casterly. ¿En su contra? Absolutamente todos la odian. |
|
Aegon Targaryen Aunque es un recién llegado a la saga su aparición no es casual si no que, con toda seguridad, tendrá un papel importante, lo que no se puede saber si será un paso fugaz o ayudará a recuperar la costumbre Targaryen de casamiento entre parientes. |
En otro orden también albergan posibilidades aunque a mi entender menores:
- Brandon Stark
- Su futuro parece ligado a las visiones y a los aurianos. Probablemente será un aliado y un activo importante en la causa de alguno de sus hermanos.
- Samwell Tarly
- Va ganando peso (figuradamente) a lo largo de la saga y aumentando en habilidades y confianza. Su viaje a la Ciudadela no servirá para coronarlo rey, pero sí para prepararlo como mano ya que como maestre es tarde para iniciar su preparación y que sirva al argumento.
- Mance Raider
- Tiene muy pocas posibilidades, casi ninguna, pero no estará exento de protagonismo. Contribuirá a integrar a los salvajes, a derrotar a los Otros y a defender el muro cuando éstos lo hagan desaparecer.
- Tommen Lannister
- Será el gran olvidado. Actualemente es el rey y lo es por accidente, puede que siga así o no...
- Petyr Baelish
- Varys
- Los caminantes blancos
- Muy interesante esta opción, evidentemente no nos han contado nada de ellos, no sabemos qué pretenden o qué son. Veremos muchas novedades.
- Robert Arryn
- Jorah Mormont
- cualquiera de la casa Martell
- cualqueira de la casa Tyrell
- cualquiera de la casa Frey
Bien, tras el divertimento os dejo con la reflexión y os invito a comentar la entrada despotricando contra mis razones.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)