Ayer fue uno de los días más esperados de la democracia reciente porque se suponía que debería haberse resuelto, al menos por un tiempo, la cuestión del soberanismo e independentismo, pero la cosa no resultó, vuelve a haber tablas virtualmente por lo que aún queda un tiempo de debate y de polarización. Que nadie se lleve a engaño, no lo digo de forma despectiva, yo (al margen de mi ideología) disfruto con el debate y me sumo a lo que un conocido escribió en una red social. Venía a decir que el hecho de volver a votar tras sólo dos años de gobierno no le representaba ningún problema, al contrario, lo veía como una ventaja, así los políticos se han mantenido activos y pegados a la gente
Dicho esto vamos al turrón porque los datos son muy jugosos y darán mucho juego a especulaciones y prospecciones de futuro.
El primer dato a destacar es la participación, con 4.106.689 de votos representando más del 77% de la población con derecho a voto podemos hablar de auténtico éxito de la democracia y de que estas elecciones sí interesaban. Aún así no hubo cambios respecto a diferentes encuestas previas, el independentismo y el no-independentismo empatan. (Cuidado a no confundir no-independentismo con unionismo ya que aquí se incluye a los que defienden el derecho al referéndum pero no apuestan explícitamente por el sí.)
Candidatura formada por Convergència Democràtica de Catalunya (CDC) y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC). Es la formación ganadora ya que suma 62 escaños con 1.617.734 de sufragios que suponen casi el 40% de los votos válidos. Son el caso más complejo de analizar puesto que la referencia anterior es con ERC por separado pero coaligada a Catalunya Sí y con CDC federada a UDC (Unió Democràtica de Catalunya). En los comicios de 2012 los diputados fueron 71 si sumamos los resultado. en cuanto a votos en cambio casi no hay cambios si no contamos con los más de cien mil que esta vez han ido a Unió. En cualquier caso con el incremento de participación perder representación por poca que sea se puede comprender siempre como un retroceso. En todo caso hay que tener en cuenta que CDC ahora se encuentra con las sedes embargadas y dentro de un proceso de investigación por corrupción muy importante. Con estos resultados cabe pensar que el votante medio prefirió votar al objetivo común de la coalición obviando los problemas de una de las partes. Ahora hay que esperar si Artur Mas será investido presidente como estaba previsto o si lo sacrifican para conseguir el apoyo de las CUP.
Era una subida prevista aunque quizá no de este calibre, pasa de nueve a veinticinco escaños en dos años, en parte los perdidos por el PP y en parte por los caídos de la extinta CiU. Ciudadanos, se consolida como la nueva cara de la derecha en Catalunya, lo cual les da esperanzas legítimas a dar una gran sorpresa el próximo veinte de diciembre. Tampoco cabe olvidar la etiqueta de reformistas con la que se presentan confundiendo a muchos votantes que no aciertan a advertir las medidas socioeconómicas dignas de cualquier neoliberal que se precie. Ciudadanos es ya la alternativa unionista y conservadora al PP.
El Partit dels Socialistes de Catalunya ha salvado los muebles, sólo pierde cuatro escaños y unos cuatro mil votos, lo cual es malo con el aumento de participación. Miquel Iceta no ha hecho mal papel teniendo en cuenta la crisis de su partido asociado, el PSOE, y el atropellamiento que viene siendo tradicional de reformas constitucionales en base a federalismos indefinidos con los que siempre sale en estas contiendas. El PSC no se la ha jugado y ha desarrollado el discurso de siempre erigiéndose en líder de la izquierda.
La apuesta de Podemos que ha arrastrado a ICV y a EUiA. Su razón de ser ha sido aprovechar la indefinición propia de estas formaciones para unir esfuerzos que permitieran que ICV y EUiA sacara rédito del tirón de Podemos mientras que esta ha estado buscando un espacio que le ha sido negado en autonomías no tan bipartidistas. Personalmente creo que uno de los errores ha sido el nombre, chirría, suena mal en catalán y su acrónimo, CSQEP, tampoco ayuda a esa agradabilidad estética. Sumado al movimiento de su cabeza de lista, Lluis Rabell no es Albano Dante ni tiene su credibilidad, nos encontramos con que menos del 9% les ha apoyado otorgando 11 escaños a la coalición, menos que los 13 que obtuvieron las dos formaciones de izquierda en la pasada convocatoria
El otro gran perdedor. El Partido Popular pasa de 19 a 11 y se confirma su tendencia a la marginalidad de la política catalana. La elección de Xavier Carcía Albiol no fue casual, tampoco defenestrar a Sánchez-Camacho. El PP en Catalunya necesita renovarse y ahora era preciso quemar a alguien, alguien que representa todo aquello que se ha pretendido esconder siempre, el reaccionarismo ultraderechista xenófobo y racista que sin ser todo el electorado popular si que suele prestarle el voto. Sin discurso más allá del unionismo los recortes y una política estatal antidemocrática les ha pasado factura en un feudo que siempre fue duro.
Las Candidatures d'Unitat Popular están llamadas a ser la muleta de JxSí por cierta afinidad ideológica. Digo cierta porque más allá del independentismo poco tienen que ver. Esta es la única candidatura con representación auténticamente rupturista que no sólo se plantea el encaje en España si no también en Europa y con el euro. Las CUP son un partido atípico que esperó a estar afianzado en los municipios antes de lanzarse a lo grande. Diez diputados después de sólo tres en sus primeras elecciones. Lo que parece claro es que no apoyarán a JxSí mientras el candidato sea Artur Mas lo cual nos puede llevar a ver a Junqueras o incluso a Romeva de presidente.
CONCLUSIONES
La situación es compleja puesto que como ya he apuntado antes se esperaba solucionar la cuestión soberanista en un sentido o en otro y esta ha quedado abierta en unas tablas que se antojan a largo plazo si no fuera por una cuestión nada desdeñable. La mayoría de medios destacan que el independentismo si bien tiene mayoría en escaños no la tiene en votos, 47'75% sumando JxSí y CUP, otorgando el 52'25% restante al unionismo obviando que los integrantes de CSQEP, y hablo de partidos, han defendido el derecho a decidir sin postular claramente si su opción preferida es sí o no (Podemos sí ha dicho que prefiere un no, pero vistos los resultados parece que ha restado más que añadido a lo que representaba ICV y EUiA). Añadamos a los partidos sin representación que suman un 1'12% y no se han pronunciado y el 2'51 de Unió y nos queda lo siguiente:
Independentistas expresos | 47'75% | JxSí y CUP |
Unionistas expresos | 41'66% | C's, PSC, PP y Unió |
Por el derecho a decidir | 8'95% | CSQEP y Pirata.CAT/XDT |
No definidos | 1'11% | PACMA, Recortes Cero-Els Verds y Ganemos |
Porlo tanto no sería fácil cantar victoria antes de tiempo por ninguna de las partes. Cierto es que en caso de empate se mantiene el statu quo y no hay cambios, pero sí que podemos recordar que los que han defendido públicamente que se pueda votar suman el 56'7% de los sufragios por lo que parece de recibo permitir el referéndum que elimine de una vez por todas las dudas.
En el caso de haber tenido un gobierno del estado a la altura o con capacidad política someramente profunda, este referéndum se habría realizado ya y con todas las garantías democráticas requeridas. El problema no ha sido que el referéndum sea legal o no, o que se esté por la unión más que por la independecia, no. El problema es un gobierno rancio que no soporta que se ponga en duda la sacrosanta unidad de España (unidad de destino en lo... etcétera.) y mientras sigamos planteando que las herramientas de convivencia no son revisables, editables y hasta revocables.
En fin que seguiremos atentos a la política, catalana en este caso, y ojo avizor a los que secuestran opiniones y cincelan en piedra normas fundamentales mientras revisan otras no menos importantes (sí hablo del 135).